REMEDIOS CASEROS PARA LAS INFECCIONES

• Es normal que las mujeres tengan secreción en diversos grados a lo largo del ciclo menstrual.
• Aconsejar un examen médico en caso de sospecha de infección abdominal, también en caso de sospecha de hongos, para evitar el sobretratamiento con medicamentos de venta libre y reducir el desarrollo de resistencias.
• Siempre que sea posible, debe preferirse el tratamiento local.
• La infección por Trichomonas siempre debe tratarse en mujeres no embarazadas, incluso en ausencia de síntomas.

Tratamiento local con antibióticos

Si una infección es causada por una bacteria, el tratamiento con antibióticos suele ser eficaz. Cuando una bacteria causa una infección en la piel, generalmente puede ser beneficioso tratar la infección directamente con una crema o ungüento. Esto reduce el riesgo de efectos secundarios, ya que solo actúan localmente en lugar de en todo el cuerpo. Los agentes actúan matando las bacterias. 

Los antibióticos afectan la estructura de las células bacterianas que no se encuentran en las células humanas y, por lo tanto, nuestras propias células no suelen verse afectadas por el tratamiento con antibióticos.

Tratamiento local del herpes.

Una infección por herpes generalmente ocurre como un herpes labial o como una úlcera genital. El fármaco utilizado en los dos modos es el mismo. El fármaco inhibe una sustancia que solo contiene células infectadas por herpes. Las células deben usar la sustancia para reproducirse y, debido al bajo nivel de esta sustancia, se detiene la producción de virus. 

El tratamiento debe comenzar con los primeros signos de un brote. Existen varios medicamentos que combaten la infección por herpes, como el aciclovir, que debe usarse 5 veces al día, y el penciclovir se lubrica cada dos horas.

Tratamiento local de verrugas genitales.

Las verrugas genitales son causadas por un virus que se transmite sexualmente. Las células infectadas por el virus se reproducen si no se tratan con medicamentos. 

El medicamento que se aplica directamente a los genitales ingresa a las células infectadas con el virus y evita que las células se dividan. Por lo tanto, el virus no se puede propagar y las verrugas genitales irán al suelo. 

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Resumen Debe evitarse el tratamiento excesivo de las infecciones vaginales y vaginales, y es importante el asesoramiento de un examen médico para un diagnóstico adecuado.  En caso de que el tratamiento no tenga efecto, el paciente debe comunicarse con un médico.  Las mujeres embarazadas con síntomas de VB, infección por tricomonas y vaginitis aeróbica deben recibir tratamiento. 

En general, debe preferirse el tratamiento tópico en caso de infección en la abertura vaginal y la vagina, mientras que la infección por tricomonas siempre debe tratarse por vía oral.

Sin embargo, el equilibrio vaginal puede verse alterado por una serie de factores naturales y externos:

• Estrés , estrés mental
• cambios hormonales (por ejemplo, embarazo, menopausia )
• un sistema inmunológico debilitado
• anticonceptivos hormonales (por ejemplo, píldoras )
• Tomar antibióticos
• enfermedades crónicas subyacentes (por ejemplo, diabetes)
• Higiene íntima excesiva, incorrecta o inadecuada.
• relaciones sexuales sin protección

Todos estos factores pueden alterar fácilmente el equilibrio del entorno vaginal natural: luego se reducen importantes lactobacilos y, como resultado, los microorganismos no deseados pueden asentarse y multiplicarse sin obstáculos.

Los síntomas de una infección vaginal.

Los síntomas clínicos de una infección vaginal son muy diversos y, dependiendo del patógeno y del estado inmunológico u hormonal femenino, pueden ser diferentes, parecerse o incluso estar completamente ausentes. Se requiere especial precaución con las infecciones bacterianas y micóticas, ya que a menudo se mezclan sin el examen de un médico especialista.

Signos típicos:

• flujo vaginal incómodo (aumentado)
• Picazón y ardor en el área genital.
• Enrojecimiento e hinchazón de la piel vaginal.
• Dolor al usar el baño / tener relaciones sexuales
• sangrado fácil

Secreción vaginal

Básicamente, el flujo vaginal es completamente normal y en sí mismo no es motivo de preocupación. Está sujeto a fluctuaciones hormonales y generalmente comienza antes de la pubertad y dura hasta la menopausia. En el caso de una infección vaginal, la consistencia y el color de la secreción suelen cambiar y, a menudo, también su olor. Por esta razón, la naturaleza de la descarga a menudo permite sacar conclusiones iniciales sobre el tipo de patógeno que la causa.

Una secreción de color amarillo verdoso, como un pez, maloliente, es característica de la vaginosis bacteriana . Una infección por tricomonas también puede producir un hallazgo similar, aunque aquí generalmente se nota una consistencia espumosa.

Las infecciones vaginales pueden ser causadas por

Ciertas circunstancias aumentan la probabilidad de infecciones:

• Acidez más baja (pH más alto) en la vagina: a medida que baja el nivel de acidez en la vagina, la cantidad de bacterias protectoras (lactobacilos) que normalmente están presentes en la vagina y la cantidad de bacterias que pueden causar infecciones disminuyen, aumentan, a veces conduciendo a vaginosis bacteriana .
• Mala higiene: si la zona genital no se mantiene limpia, aumenta la cantidad de bacterias y aumenta la probabilidad de infección.
• Ropa interior ajustada y no absorbente: esta ropa interior permite que se acumule la humedad, lo que facilita la infección de bacterias y hongos.
• Daño tisular: cuando se daña el tejido de la pelvis, las defensas naturales del cuerpo se debilitan. El daño puede ser el resultado de tumores, una operación, radioterapia o malformaciones estructurales como B. malformaciones o fístulas congénitas. Las fístulas son conexiones notables entre órganos. B. El contenido del intestino (incluidas las bacterias) puede ingresar a la vagina.
• Irritación: la irritación del tejido vaginal puede provocar grietas o heridas, que pueden liberar bacterias y hongos en el torrente sanguíneo.